El rugido del Fernando Astobiza, el campo donde juega el Cayón, se escucha hasta en Cabárceno. Entre cebras y elefantes salió el hierro suficiente para construir un ferrocarril que solía coger un tío fornido y corpulento. El hilo del Cayón, vamos.
El rugido del Fernando Astobiza, el campo donde juega el Cayón, se escucha hasta en Cabárceno. Entre cebras y elefantes salió el hierro suficiente para construir un ferrocarril que solía coger un tío fornido y corpulento. El hilo del Cayón, vamos.
Superan al Formentera, pero caen frente al Arenas. En 2015 superan al Navalcarnero y Condal, pero caen en la final frente a otro gualdinegro, el Portugalete. Finalmente el Caudal en 2016 y el Rápido de Bouzas en 2017 les impiden dar el gran salto para desgracia de su fiel afición.
Asi que si os hacéis un Manu Ginobili pasando por Cabárceno para ver cerdos vietnamitas y oís voces a lo lejos, que sepáis que eso es Sarón. Que sepáis que eso es el Cayón. Créditos: Gracias a la ayuda de @MegafonoPasiego y al @CDCayon por su tiempo en el Astobiza. The end.