Hemos estado en Gavá, presenciando las lonas verdes que cubren del sol los pisos adyacentes a este estadio. La Bóbila.
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Hemos estado en Gavá, presenciando las lonas verdes que cubren del sol los pisos adyacentes a este estadio. La Bóbila.
Inaugurado en 1995 el estadio cuenta con una pista de atletismo. Bueno, más bien la pista cuenta con un campo de fútbol en su interior.
Nuevamente el terreno de juego se encuentra en unas condiciones espectaculares, como casi todos los campos pisados en Catalunya.
Y nuevamente accedemos al terreno de juego sin mayor problema. Un terreno que debutó en 2B en 1995 por descenso administrativo del Palamós.
El Gavá de Antoni Llebaria debutó quedando 7°. ¿Sorprendente?. Lo sorprendente fue que la plaza del Palamós se ofreció a múltiples equipos.
El Tárrega la rechazó, el Vilobí la rechazó, el Barcelona C (ojo) la rechazó, el Horta tambien, y finalmente el Gavá aceptó de buen grado.
Continuemos el camino por La Bóbila. La tribuna tiene cabida para 800 espectadores. El campo, entre 1.700 y 2.500 en total.
La portería del fondo es de infausto recuerdo para los centuriones de Castalia. El año pasado perdieron el ascenso por penaltys aquí (6-5).
Tanto en la anterior foto como en esta se puede ver el mejor detalle del campo. La chimenea que homenajea el pasado industrial de Gavá.
En total, 9 temporadas de Segunda B jugó aquí el Gavá. Alex García, Coromina, Enric Socías, Albesa, Puigdollers…nombres míticos aquí.
Imagínate si una pista de atletismo añade mucha separación de la grada, añadirle una pista de salto. Presión ambiental en negativo.
Nos retiramos de La Bóbila. El Gavá este año ha sido un polvorín que ha estallado con un descenso administrativo. Aquí pasarán cosas.
